DIOS NO ME ENSEÑO
Dios me enseñó la luz
en el brillo luminoso de tus ojos...
y el nectar de la vida
me lo brindó en tus besos.
Me enseñó el amor entre tus brazos,
pero tu destruiste el embelezo...
y mantando aquel hermoso frenesí
lo deshiciste todo en mil pedazos
y... Dios no me enseñó
como vivir sin ti.
Dios me enseñó la luz
en el brillo luminoso de tus ojos...
me enseñó muchas cosas
que contigo aprendí...
a beber en la fuente
de tus labios rojos...
el mundo encantado de las rosas...
que la vida fue a tu lado
¡MARAVILLOSA!
Pero... DIOS no me enseñó
como vivir sin tí.
Félix Pagés-Romeo