"El placer es el mejor de los cumplidos." Coco Chanel
El más encantador instante de la tarde tras el anaranjado visillo primorosa. Y en la mesita el té y un ramillete, desmayadas rosas, y en la otomana de rayada seda, extendida la falda, asomando mi pie provocativo, aguardo a que tú avecines a mi cuello, descendiendo la mirada por el oscuro embudo de mi escote, ahuecado a propósito. Sonrójome y tus dedos inician meditadas cautelas por mi falda; demoran en los profundos túneles del plisado y recorren las rizadas estrellas del guipur. Apresúrate, ven, recibe estos pétalos de rosas, pétalos como muslos de impolutas vestales, velados. Que mi boca rebose en sus sedosos trozos, tersos y densos cual labios asomados a mis dientes exigiendo el mordisco. Amordázate, el jadeo de tu alto puñal, y sea tu beso heraldo de las flores. Apresúrate, desanuda las cintas, comprueba la pendiente durísima del prieto seno, míralo, tócalo y en sus tiesos pináculos derrama tu saliva mientras siento, en mis piernas, tu amenaza.
Autor del poema: Ana Rossetti
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