¡¡¡Mi querida Verona!!!
¡¡¡Qué alegría verte nuevamente por aquí!!!
¿Cómo piensas que te vamos a sacar de la casita?
¡¡¡Nunca mi vida, nunca!!!
Me alegra saber que has encontrado una solución a ese
problema que te causaba tanto dolor.
Pero no te esfuerces amiga, dale tiempo al tratamiento.
Nosotros también te extrañamos mucho y también
a tus bellos diseños.
¡Vuelve pero despacio... aquí te esperamos siempre!
¡¡¡Cuídate por favor!!!
¡¡¡Miles de besitos mi cielo!!!
Graciela