Resignada y en silencio me escuchaba sin parar mi ansiedad por conversar aunque solo un monologo lograba en mi hora de terapia en el desván
Al salir del consultorio me sentía sin las piedras que cargaba hasta llegar sin embargo retomando mi rutina comprendía que ya nada seria igual
No busque tras la puerta la salida me encerraba y pensaba solo en ti y ya a un año de la triste despedida me avergüenzo por seguir llorando así
Un amigo que te escucha me confiesa que mi nombre varias veces se escapo en la charla de café alguna noche en que triste y muy solo se te vio…
Se muy bien que si un día te cruzara o las rutas nos cruzaran a los dos rozaría tus manos sin sentido buscaría una palabra de pasión
Sin embargo soy conciente que el pasado al marcharte fue quebrando nuestro amor si me nombras no será por que me extrañas si te nombro es un dejo de dolor…
- Noemí Bianchi -
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