En cierta ocasión, un reportero le preguntó a un agricultor si podía
divulgar el secreto de su maíz, que ganaba el concurso al mejor producto, año tras año.
El agricultor confesó que se debía a que compartía su semilla con los vecinos.
"¿Por qué comparte su mejor semilla de maíz con sus vecinos, si usted
también entra al mismo concurso año tras año?"-preguntó el reportero.
"Verá usted, señor," dijo el agricultor.- El viento lleva el polen del maíz maduro,
de un sembrio a otro. Si mis vecinos cultivaran un maíz de calidad inferior, la
polinización cruzada degradaría constantemente la calidad del mio. Si voy a
sembrar buen maíz, debo ayudar a que mi vecino también lo haga"
Y lo mismo es con otras situaciones de nuestra vida. Quienes quieran lograr el éxito,
deben ayudar a que sus vecinos también tengan éxito. Quienes decidan vivir bien,
deben ayudar a que los demás vivan bien, porque el valor de una vida se mide por las
vidas que toca. Y quienes optan por ser felices, deben ayudar a que otros encuentren
la felicidad, porque el bienestar de cada uno se halla unido al bienestar de todos.
James Bender
Como Conversar Bien