Ya no seré tu princesa…
Y tú, ya no serás mi príncipe encantado.
Pero a donde quiera que vayas, en tu mente viviré.
Y a donde quiere que este, tu voz me hará eco.
Ya no seré tu barbie.
Y tú, ya no serás mi ken.
Pero a donde quiera que vayas tendrás mi mirada clavada en ti.
Y a donde quiera que este, en mis sueños te encontrare.
La luna será testigo, de dos locos que se extrañan.
Y el mar se hará más hondo, de tanto llorar.
Ya no seré la mujer de tu vida.
Y tu, mi hombre ya no serás.
Pero en donde quiera que vayas, seré la mujer de tus sueños.
Y a donde quiera que este, en mis sueños vivirás.
Te extraño...