Sentir la piel estremecida y estremecida el alma, sentir como suspira cuando la emoción inflama temblando de pasión mientras se encienden las entrañas como llamas, sentir el fuego por las venas de la vida que fluye y que arrasa cuando tus manos me moldean, cuando tu boca me desarma, sentir que no hay fronteras entre mis besos y tus ganas y que la carne se hace hoguera consumiendo la pasión que nos abraza