TU Y YO, UN GRAN AMOR
Yo tan lejos de ti, y tú, a pesar
de la insalvable barrera de la distancia,
nunca estás ausente de mí.
Tu ausencia física,la cruel soledad
y melancolía, del día a día,
convierten mi sentir por ti,
en la más bella poesía.
En la desgarbada y displicente
vida mía, tan sólo
una sonrisa tuya,
me abstrae del desquicio
y me despierta del letargo.
Y mi monotonía, color gris plata
y otoño incierto, trasluce en alegría,
con la melodía de tu voz al anochecer,
y la luz de tu mirada en la alborada
del amanecer.
Mi alma sensible, hoy, con amor
te extraña, te añora
y con fervor te adora.
Mi corazón iluso, a toda hora te extraña
y mi alma entera de ti cada día
más se enamora.
Por eso hoy,
con el resplandor de este lindo día,
quisiera estar ahí para abrazarte tiernamente,
como lo hice un día y para que sientas
todo mi amor.
Sólos tú y yo, en un gran amor
sin fronteras.
Sólos yo y tú,
en una entrega sin límites,
en un seguro viaje sin retorno,
y no en un simple amor y nada más.
Es cierto las circunstancias
y condiciones son adversas,
es el último tercio de nuestras vidas.
Pero aún así, vale la pena soñar,
caminando asidos de la mano,
por la orilla del mar.
Disfrutando de esa sonrisa tuya,
que mandaba callar
el barullo del mar;
-cual quietud en calma,
cuando hablan los corazones que se aman.
Sin más réquiem de voces altisonantes,
ni explicaciones a otras almas.
® Derechos reservados.
Autor: George Rivas Urquiza.