Dime cuando sola estés, te acariciaré hasta que desmayes y yo seré quien desnude tu vientre y acaricie tus deseos, diluiré tu tristeza y te daré calidez de alegría.
Nuestro fuego siempre quema y bullen los sentimientos... despertando el amor y la pasión en alma y corazón.
Por Rincón de Poesía. Derechos reservados de autor @.