Bálsamo
Tal vez no está en el aire tal aroma, intenso, embriagador, que me seduce; es la mente, quizá, que lo produce, al contemplar tu erótica redoma.
Resina, bálsamo, estoraque, goma, cuanto emana de ti, o a ti conduce; no sé si es mi razón que lo deduce, o si tu piel de mi sentir lo toma.
Tu llegada a mi entorno lo satura de fragancia que en mística locura me rodea, me absorbe y me enajena.
Y al yacer sobre mí, desnuda y leve, te aspiro en cada acción, cada relieve, y me siento flotar sobre la escena.
Francisco Alvarez Hidalgo.
|