El temor es lo que se vuelve después de: "me asusta" pero el temor es el problema y nuestra actitud hacia ese temor o temores es también parte del problema, dicen que tenemos la opción de ser feliz o infeliz, en este caso tenemos la opción de escoger entre el temor y las oportunidades que se nos presentan.

 

A veces o la mayoría de las veces nos encontramos confundidos, pero siempre es necesario darnos un tiempo para caminar y pensar mejor, lejos del bullicio, del ruido de los autos y las fábricas, sentarnos una noche estrellada ver las estrellas y pensar mejor, cerrar los ojos para ver que es lo que nuestro corazón tiene por respuesta a nuestras inquietudes y confusión.

 

No te dejes llevar por la corriente de las dificultades, que esas solamente te roban tus sueños y destruyen tu futuro, entre más luchas por algo más valor tendrá cuando logres conquistarle, cuando logres obtener por lo que deseas, no te desanimes por la rutina y el ocio y o los problemas, sigue adelante luchando, ¡vale la felicidad y la pena!

 

Lucha por lo que te llene el alma y eso mismo te dará ánimos, ¿qué me llena el alma, qué me emociona, qué me hace sentir mejor, qué me hace sentir que estoy vivo? medita sobre lo que te anima y te ayuda a seguir caminando entre las rocas de la incertidumbre y el viento helado de los problemas y dificultades que parece empujarte hacia atrás, pero esa llama dentro de ti, tu motor imparable que nunca dejará de seguir al menos que tú lo "apagues" con el pesimismo que te inspiran situaciones y personas. Tu opción siempre será lo que decidas, ¡siempre será o ahora o nunca!