De repente, surge la criatura mal educada que lo hace querer responder al mismo tiempo. Después de todo, sé diferente. El ceño feroz, el mal humor es una máscara que esconde la tristeza o la revuelta que pregunta "ámame, entiéndeme". No es soltar las palabras atrapadas en tu garganta lo que lo cambiará. En personas como esta, la actitud de aceptación, de no tomar represalias, mirar con calma es más interna porque hace que uno piense en el error y se avergüence. Mantenga la calma y el pensamiento positivo. Una sonrisa, un gesto, una palabra, hacen milagros. El amor es un chorro de agua en el fuego de los groseros y los odiados.- Lourival Lopes
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