Te amaré más allá de las horas,
los días y los meses, más allá de una noche llena de intensidad...
Mucho más que la muda vigilia que la luna prodiga en su rondalla,
a las nubes y al mar...
Te amaré cada día,
de un hoy cuando termine
y al iniciar de nuevo la aurora
que se anuncia...
Te amaré como fuente sedienta de ternura o como viento fuerte
que anuncia un vendaval...
Te amaré en el silencio, sin prisa y sin mentiras...
Te amaré como se ama
una vez nada más...