Si ella enrojece en el verano del amor
O en su invierno se vuelve reseca,
Si ella hace alarde de su belleza
O se oculta detrás de un falso rubor,
Vista ella de blanco o de sedas rojas,
Y se pare torcida o como recta madera,
El tiempo siempre gana la carrera
Que nos oculta bajo una mortaja.