La autoridad que se perdió, los niños de hoy la necesitan...
Los Niños de Hoy
(Continuación)
Si le tememos a las decisiones, precisión, firmeza, no estamos ayudando a los niños a madurar, ni a afrontar las crisis, frustración o dolor que, por momentos, pueden ser parte de la vida.
Muchos, pero muchos padres, están padeciendo la educación de sus hijos, sólo porque hacen lento el proceso que puede ser rápido y concreto. Y con ello también, hacen lento el desarrollo emocional del niño y debilitan su autoestima.
La educación es difícil cuando estamos errándole al blanco. Cuando sentimos que ser un poco antipáticos, cortantes y precisos, está mal. En todo caso sería así, si lo hacemos siempre, o bien, si no hay reflexión y conciencia en ello.
Pero no es el caso, más bien es el opuesto. Los niños nos están pidiendo, por favor, que nos hagamos cargo de nuestro rol, que tomemos decisiones, que les marquemos las pautas, que les digamos que “no”.
Hay que enseñarle al niño vivir en una vida real, y para ello necesita registrar una sana autoridad. Si cree que siempre recibirá un “si” de todos y todo, cuando salga al mundo y se encuentre con la realidad, bajará los brazos ante la primera dificultad. En cambio, si sabe que afuera puede encontrarse con límites, tendrá la fortaleza y confianza para afrontarlos, respetarlos o superarlos.
Para soportar la aparente angustia de un niño, el adulto debe cambiar su propia relación con el dolor, así como también el concepto de protección; abrirse a la idea de que acompañar y permitir un llanto, frustración o resistencia también es amar y cuidar profundamente.
Autora: Nancy Erica Ortiz
Pedagoga Integral