Muchas personas tienen un mal concepto de la tercera edad, sin saber que es precisamente en este periodo donde inicia una nueva forma de vida con nuevas oportunidades para pasar más tiempo con nosotros mismos y conocernos mejor. Estés o no en tus años dorados, estas sugerencias que te presentamos a continuación te ayudarán a entender y disfrutar de esta época de cambios y sabiduría. 

Ya has vencido muchas dificultades a lo largo de la vida, ya te estresaste lo suficiente por cosas que si hoy las piensas, no merecían tanta dedicación. Tienes recuerdos buenos y malos, pero lo importante es el presente. No dejes que el pasado te arrastre con él y no dejes que el futuro te asuste. Siéntete bien en el presente, las pequeñas cosas se olvidarán pronto.

9. Respeta a las generaciones jóvenes y sus opiniones

Puede que ello no tengan los mismos ideales que tú, pero son el futuro de tu país y del mundo. El mundo ha cambiado y es normal que no tengan los mimos hábitos o pensamientos que tenías tú a su edad, y eso no está mal. Aconséjalos pero, no los critiques, e intenta recordarles que la sabiduría de ayer, aún puede ser aplicable hoy.

11. Acepta tus años dorados

Mientras algunas personas aceptan con felicidad esta nueva etapa de la vida, otras se vuelven amargas y gruñonas. La vida es demasiado corta para malgastar tus días sin disfrutar ni vivir a plenitud. Utiliza tu tiempo de manera positiva, alegra a la gente, esto los atraerá hacia tu persona y tus días serán mucho mejor. Si pasas el tiempo con gente amargada, te volverás como ellos y será difícil compartir tiempo contigo.

12. No caigas en la tentación de vivir con tus hijos o nietos 

(Siempre que tengas la posibilidad financiera). Ciertamente, encontrarse rodeado de los seres queridos suena grandioso, pero todos necesitamos privacidad. Ellos necesitan la suya y tú la tuya. Si has perdido a tu compañero, busca una persona con la que puedas vivir. Aun así, solo vive con alguien en caso de que pienses que lo necesitas.
 

14. Sé un buen conversador, habla poco y escucha más

Algunas personas solo hablan del pasado, sin importarles que sus oyentes están interesados. Esa es una forma muy sencilla de reducir el deseo de escucharte. Escucha primero y haz preguntas, pero no cuentes historias largas a menos que lo pidan. Habla en tono cortes e intenta no criticar o quejarte a menos que realmente lo necesites. Acepta las situaciones como son, todos pasamos por las mismas cosas y las personas tienen poca tolerancia a las quejas. Siempre encuentra algo bueno que decir. 

15. Los dolores y el malestar vienen de la mano con la edad

Intenta no afligirte por ellos, sino aceptarlo como parte de un ciclo de la vida al que todos llegaremos. Intenta minimizarlos en tu mente. No eres solo eso, solo son parte agregada a tu vida. Si se vuelven el centro de tu atención, perderás la noción de la persona que solías ser.

16. Si fuiste ofendido por alguien, perdónalo, si ofendiste a alguien, pide disculpas

No te enredes en el resentimiento, lo único que hará es volverte amargo y triste. No tiene importancia quien estaba en lo correcto. Alguien una vez dijo: "Guardar rencor es como tomar veneno y esperar que la otra persona muera". Perdona, olvida y sigue adelante con tu vida.
 
17. Si crees fervientemente en algo, disfrútalo, pero no trates de convencer a los demás de ello

Ellos tomarán sus propias decisiones sin importar lo que tú les digas y eso solo te traerá frustración. Vive con tu fe y da el ejemplo. Vive de acuerdo a tus creencias y deja eso como legado.

18. Acepta invitaciones y sal de la rutina

Bautismos, graduaciones, cumpleaños, bodas, conferencias, etc., e intenta ir. Sal de la casa, encuéntrate con personas que no has visto hace mucho, experimenta cosas nuevas (o viejas que hayas dejado de hacer y te agradaban). No te molestes cuando no eres invitado. Algunos eventos son limitados por los recursos y no todos pueden ser invitados. Lo importante es poder salir de la casa de tanto en tanto. Ve a museos, pasea.