Desconozco el autor

Cuando leí ésta bella historia me hizo recordar ese amor que me mostró Jesús al morir en mi lugar. Él nos enseña como debemos amar a las personas, en su palabra hay muchísimas enseñanzas que nos ayudan a saber amar de la manera que Dios desea que lo hagamos.

Amiga(o)...Hoy, antes de decir algo destructivo a alguien, piensa bien lo que vas a hablar, recuerda que hay personas en el mundo que no pueden hablar y anhelan poder hacerlo para poder hablar las palabras más bellas que guardan en su corazón, no uses tu voz para decir palabras destructivas. Dios te dió tu voz para que salgan palabras de bendición.

Antes de quejarte por el sabor de tu comida, mejor agradece a Dios por el alimento que te da, recuerda que hay muchos en el mundo deseando ese plato de comida que tú tienes.

Antes de quejarte de tu pareja, haz un alto y piensa en el montón de corazones tristes y solitarios que añoran un compañero.

Ama a tu pareja, cuida bien de esa ayuda idónea que Dios te regala. Antes de quejarte de tus hijos, piensa en aquellos que no los tienen y los desean, recuerda que tus hijos son pequeños angelitos que Dios te presta para que los ames y cuides muy bien de ellos. Cuando estés cansado y reniegues de tu trabajo, piensa en los millones que están desempleados y desean el tuyo.

Aradece a Dios por la fuerza y sabiduría que te da para realizar el trabajo que Él te provee. Antes de señalar con tu dedo y tomarte la atribución de juzgar, recuerda que todos hemos cometido errores y tú eres uno de ellos.

No juzgues,tú no tienes ni un derecho de hacerlo, Dios es el único con esa autoridad, sin embargo no lo hace, Él Señor nos ama y perdona nuestro errores, TÚ HAZ LO MISMO, NO JUZGUES.

Cuando el cansancio y las tinieblas vengan a tí con pensamientos negativos y destructivos, NO LO PERMITAS, Dios espera por ti para traer descanso a tu alma y a tus huesos, Dios quiere ser el dueño de tu vida y llenar tu mente de pensamientos positivos y de bendición.
Dios quiere alejar de tu corazón toda tirsteza, quiere abrazarte con su amor y ternura, Dios quiere verte sonreir.

No pienses en los momentos que te causaron dolor y tristeza. Recuérda que tienes más motivos para sonreir, que motivos para llorar. Sonríe, da gracias a Dios porque todavía estás vivo y todabía tienes un corazón fuerte que puedes rendir a Dios dando toneladas de alabanza.

El don de la vida es un bello regalo de Dios, pero recuerda algo...No somos eternos en éste mundo; sin embargo, no hay por qué ponerse tristes por eso.

Cuando tus ojos y los mios se cierren, no habremos perdido, habremos ganado, pués EL VIVIR ES CRISTO, Y EL MORIR ES GANANCIA. Esa es una razón de alegrarse porque estamos a un paso de comenzar la aventura mas linda de nuestras vidas, será la mejor celebración y el mas hermoso viaje.

Por último déjame decirte que "la mejor manera de mostrar a Cristo nuestro amor es:

Amar a nuestro prójimo como
a nosotros mismos

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