Mis queridos amigos:
Hoy mi cielo y mi vida no son compatibles, porque mi cielo esta nublado, si literalmente, no, no lean entre las líneas no hay necesidad de nada de eso, es que hace días que nos azotan fuertes aguaceros y unos vientos. Pero a pesar de todo eso veo en mí un poco de alegría, entusiasmo, deleite y orgullo. Es que mi vida rehúsa rendirse ante tanta adversidad. Irónico es todo esto. Claro, porque hace días que no veo el sol y lo único que he sentido es el castigo de las lluvias sobre mi cuerpo, pero las he recibido con gracia, bondad y dignidad. Porque sé que en mi islita el agua se escasea hasta llegarse a racionar hasta la última gotita. Y no somos como el resto del Caribe en donde toda construcción para ser aprobada dentro de su estructura debe de tener una cisterna. Pero las que existen en nuestra islita son todas artificiales y hechas de plástico. Así que yo aprecio la lluvia en muchas formas. Ayer fue un día que lo pasé muy preocupado porque estando en una embarcación sufrimos el abatimiento tanto del agua como la del viento. Hasta fuimos impactados por otra embarcación que salió corriendo de aguas seguras para que el mal tiempo no lo cogiera pero lo que hizo fue sacarnos de anclaje y ponernos en peligro. Aunque me dio coraje pude controlar la situación y salir airoso, bueno y sano. Y llegar hasta el muelle con todos en mi embarcación salvos aunque venía con un motor de los dos averiado logré atracar en el muelle.
Y qué tiene que ver con todo con esta primera oración: “Hoy mi cielo y mi vida no son compatibles” porque a pesar de todo en mi vida ya no hay problemas solo situaciones, y todos ellas tienen remedio, aunque no siempre un remedio inmediato, pero los hay. Y cuando no se puede yo pongo mis problemas en manos de mi “Poder Superior” que en mi caso es Dios. Yo he empezado a pensar, bueno más bien ponderar, Por qué: Yo no me dejo empapar de mis situaciones en especial cuando el producto final no se puede controlar aunque sea una situación irremediable y de altas consecuencias. Primero muchos de nosotros quisiésemos jugar a ser Dios… Para decidir quien vive y quien muere. O de quien será la buena o la mala suerte… Y porque siempre que nos sale algo mal lo que primero sale de nuestras bocas es la aserción de preguntarle a Dios. ¿Por qué tú dejas que nos pasen estás cosas? Cuando la realidad del ser humano es nacer, crecer y en algún momento dado morir y de eso nadie tiene un control absoluto. Así que nadie es indispensable. En otras palabras llegamos a este mundo con nada y nos vamos sin nada. Así que yo me digo, porque preocuparme si lo único que cuenta es el ahora, porque ya ayer pasó y mañana todavía no ha llegado. Yo veo las cosas de esta forma y siempre me sigo recordando qué: “El Pasado en el Presente no tiene Futuro.” Es que yo vivo “Sólo por hoy.”
Y qué tiene que ver con todo con esta primera oración: “Hoy mi cielo y mi vida no son compatibles.” Y mucho menos negociables. Si hablo de mi existencia, de mi ser, de mi vida, y de cómo es que me siento exactamente ante todas mis adversidades. ¡Y mi libertad no tiene precio! La verdad del caso es qué podemos hacer con el hambre en Biafra, Congo, Etiopía, o por la que esta pasando nuestro país. De qué los políticos sean una banda de pillos un algo así como “Ali Baba y los cuarenta ladrones. ¿Díganme que podemos hacer con la rampante corrupción de la Argentina? ¿El derrocamiento en Honduras? ¿Las matanzas todavía de la Nicaragua? (Como el suicidio del Tri-campeón de boxeo Alexis Arguello.) La adicción de Michael Jackson, si todavía hay viejecitas que van de pueblo en pueblo buscando recetas para sus pepas o pastillas de doctor en doctor, porque ya en sus respectivas barriadas las conocen y rehúsan venderle más estupefacientes para seguirse drogando. Que no son ni mejores ni peores de los que deambulan y se paran por las esquinas a mendigar para mantener sus vicios o las mujeres que se prostituyen para hacer lo mismo. ¿Díganme qué podemos hacer? NPI. No tengo idea. ¡Ni de porque las niñas hoy ya son madres y sus madre abuelitas con apenas menos de 30 años de edad, increíble pero cierto!
Y qué tiene que ver con todo con esta primera oración: “Hoy mi cielo y mi vida no son compatibles.” Yo he sobrevivido todo eso, hoy llevo una sonrisa en mi cara, hoy puedo sonreír a pesar de que los Judíos y los palestinos se sigan explotando, que los árabes quieran vivir en sus desiertos como insectos, en vez de carpas beduinas y sus largas caravanas, ya han olvidado los camellos ahora todos tienen “Rolls Royce” tienen un ser castrado para que no les violen las 100 doncellas que le han llegado vía UPS o Federal Express del cielo porque se las merecen, no por haberse sacrificado o explotado y matado gente inocente sino porque, si han explotado económicamente al resto del mundo. Increíble verdad. ¿Y que podemos hacer nosotros dejar de depender de todos ellos? Irónico verdad. Díganme qué podemos hacer, seguir mandando tropas para velar los intereses de otros, porque son aliados de NATO, OPEC o de Chávez, je, je, je. ¿Y para que sirve las Naciones Unidas?
Y qué tiene que ver con todo con esta primera oración: “Hoy mi cielo y mi vida no son compatibles.” Mucho, yo ya no soy esa mosca pegada al papel con pega y he dejado de sentirme inútil. ¿Por qué? Porque como quiera que sea, moriré, nadie cambiará al mundo, los ricos no dejaran de ser ricos ni los pobres, más pobres. Que si en el Brasil la gente viven en Favelas como los africanos de Soweto, y en la Argentina los cartoneros viven al margen de su sociedad y en México los niños de las calles viven en zaguanes todavía. ¿Qué podemos hacer? Nada… ¿Cuántos fueron salvados en Nueva Delhi, India, por Madre Teresa de Calcuta? ¡Para regresar muchos de ellos a la misma miseria de antes, porque ya ella no esta! No me agrada nada de esto y decirlo menos. ¿Pero quién puede decirme que puede tapar el cielo con la palma de la mano? Y esa es hoy día nuestra realidad… Sí, podemos ayudar, aliviar, pero erradicar, no lo creo posible. No ven. Es que amamos mucho el materialismo. Hoy podemos ver el tele-evangelismo y a quienes se lucran de todo eso. Viviendo como pavos reales escondidos detrás de sus máscaras, y los pedos filáticos todavía haciendo de las suyas y las iglesias siguen pagando con el dinero del pueblo por los desajustes de los santos que viven detrás del podio que han jurado abstinencia, pero de qué... Mientras nuestra sociedad y su economía sufren, los deambulates se mueren por todas las esquinas de las enfermedades y del hambre. Mientras las iglesias crecen nuestra sociedad se muere de hambre: ¿y que hacen ellos? Muy poco, tal vez algo, pero el resto qué, nada. Es como dicen los americanos: “Is all about the Money, the stinking Money.” Y nosotros nos llenamos la panza con los himnos nacionales: ¡Ay Bendito! ¡Pobrecito! Mientras los que trabajan siguen manteniendo a los “Chanchos Rengos Nacionales” quienes siguen impunes, o por las amnistías o los no procesamientos mientras sean docentes, los indultos, miren a Pinochet… ¿Fue procesado por los crímenes que cometió? Y es como todo, ellos viven sus vidas, mientras madres enfermas siguen preguntando: “A dónde están los desaparecidos o mi pobre hijo.”
Y qué tiene que ver con todo con esta primera oración: “Hoy mi cielo y mi vida no son compatibles.” Yo solo tengo que dar un abrazo y un beso, que es lo único que es mío que les puedo dar desinteresadamente. Porque ese es mi propósito en este mundo, y el de salvar o mejorar las vidas de aquellos que lo buscan, pero no a los que lo necesitan, porque hay que estar dispuesto, dentro de toda humillación y humildad. Porque el crecer lleva una modalidad, sin acción seguiremos viviendo en lo mismo y en la misma miseria. O puedo enseñarte a ser feliz dentro de todo esto. Y la aceptación es lo mas cabal para poder seguir hacia delante en esta vida. Ha mucho que dejé de cavar mi propia tumba, hoy solo me presto para ayudar a otros a salir de las de ellos. Tal vez con un simple te quiero puedes que hagas lo que nadie pudo hacer con un látigo en sus manos. Porque el que da amor recibe amor.
El Poeta Rascaso
Playa de Fajardo
Puerto Rico
7-6-09