“Versos de soledad” Gracias a ti soledad, gracias por cada verso, por cada rima que tú me has inspirado… ¡Gracias! Gracias te doy, por haberme acompañado, por cada vereda, por cada sendero y carretera… en donde mis huellas, solo ellas, allí han quedado, gracias, por bosques y desiertos… Sí, estos son los versos de soledad, que a cada día a mí me han acompañado, gracias. Porque sé que me has sido una compañera fiel, porque sé que siempre has estado ahí a mi lado. Y mira lo lejos que me has traído jamás de mi lado has desertado, siempre luchando como buen soldado no sé en cuantos frentes o caminos los dos nos hemos batallados. Hoy gracias te doy porque en mi nido hoy, has dejado una paloma que a mi ha llegado con un hermoso aroma pero con sus alas heridas, pero no derrotada. Porque un alabastros cruel de ella trato como un vil retruécano, infeliz seguirás siendo, “Sempronio” en tu vida es un sueño… Hasta quien perdió, ahora a quien la lloras, y se pasa a todas horas como aquella “Sefardita” tocando en cada puerta, (como en el Cantar de los Cantares) a ver si han visto a su amante, y ahora convertido en vil y arrogante, la sigue manchando a toda hora… ¡Ay, Sor Juana Inés de la Cruz! Bien lo habéis dicho: “Hombres necios”… ¡Quienes instigan y después castigan… como los aborrezco! Piensan que de la carne hay algún trofeo… Porque padres sois y abuelos seréis, nunca olviden el que da del ala para después comer de la pechuga… ¡Porque aquí en la tierra todo se paga! Gracias Soledad, por esta gran oportunidad, ¿has visto a la paloma? ¡Mira como le han crecido las plumas! Ya esta lista casi por volar… Ya vuela de verso en verso, de rima en rima, y si vieras como lo hace en cada estribillo ellos son los más románticos y los más sencillos, ¿y si los vieran como riman? ¡Aún sin glosar! ¡Ay Mío Cid! ¡Mira a Babieca con su lindo caminar! ¡Sabes soledad por ahí dicen que las perdidas de uno son ganancias de otros! Soledad: Hoy si la vieras lo feliz que vuela… libre de todo pecado, hoy su corazón late… feliz como una taza de chocolate… No, no hay nada de luto te lo juro… Porque ya enterraron al muerto aquel que mataron de amor… “Y sólo por hoy.” La osamenta carne ha echado… Si vieran lo bella que tiene su bello cabello negro… su tez blanca, sus largar piernas y esa figurita de muñequita… que a cualquiera seduce… ella es como si fuese un dulce. ¡Mmmmmm, cuan dulce eres! Sí, gracias “Soledad.” Por todo lo que me has dado. Jamás me olvidaré de ti, por todo lo que has hecho por mi, gracias. Hoy somos dos palomas en el mismo nido, sólo por hoy llenamos el vecindario de tanto cantar, bello ruido, convertido en trinar. En sintonía con un alma que ni sufre y ni llora… ¿Qué harás ahora? ¡Cuando fuiste por lana… y regresaste trasquilao! ¿Dime a donde mandarte mi fiel soledad? Que ella te llevará, por el mismo camino por donde peregrinó aquel Alquimista quien conquisto sus sueños… ¿y tú conquistaras los tuyos? No sé… es que así son las aves de rapiña. Suerte te deseo por tu nuevo camino. Soledad. El Poeta Rascaso Playa de Fajardo Puerto Rico 5-15-10