Amor | 16443 lecturas
La historia relata que un hombre castigó a su hija de 5 años de edad por
desperdiciar una hoja de papel dorado que era muy costosa. La niña había usado
el papel para decorar una caja y ponerla debajo del árbol de Navidad. En su
inocencia y llena de amor la niña le trajo la caja de regalo a su padre. "Esto
es para ti, papito, Feliz Navidad."
Ante esta actitud, el padre estaba
avergonzado por su reacción, al abrir la caja y viendo que estaba vacía, se
volvió a enfurecer... "¿No sabes, jovencita, que cuando das un regalo a alguien,
se supone que debe haber algo dentro?" le dijo.
La niñita lo miró con
lágrimas en sus ojos y le dijo: "No, papito, no esta vacía, le puse besitos
hasta que se llenó."
El padre no pudo creer lo que estaba escuchando, quedó
destrozado, cayó de rodillas y abrazó a su pequeña hija, y le rogó que lo
perdonara por su innecesario enojo.
Poco tiempo después, en un accidente, la
niña perdió la vida. La angustia y el dolor acompañó a su papá por el resto de
su vida, por momentos sólo le traía consuelo abrir esa caja dorada y tomar de
ella un besito que su hija había guardado con tanto amor.
En esta Navidad,
simbólicamente, coloca una caja decorada con papel dorado que represente tu
corazón y pídele a Jesús que lo llene con su amor y paz, para que cuando
enfrentes dificultades y tristezas, puedas abrirla y disfrutar de la maravillosa
presencia de JESÚS.
No olvides jamás esto:
"Si quieres encontrar a
Jesús, no lo busques en otra parte que no sea el corazón del hombre, es el único
lugar donde puede habitar"