Dice en su locura extrema, Y se va por otra parte... Cada loco con su tema. Toda esa pasión que abrasa ¿Lo creerás?... Es humo, es humo que pasa, Nada mas!...
Sucede esto a cada paso En nuestra existencia escasa: Y ¿creerás, mi bien, acaso, Que el humo también no pasa?... ¡Ay! De esa ventura leda Que te hechiza, Pasa el humo y solo queda La ceniza.
El amor que ardiente bebes Y que al Empíreo te eleva, Ceniza es que el viento lleva Envuelta en sus ondas leves, De tanto amor, entusiasmo Y contento, No resta ¡cruel sarcasmo! Sino viento
BENJAMÍN BLANCO
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