FUE EL DEMONIO
¿Fue Dios quien te trajo a mí? ¡No! ¡Fue el miserable demonio que quiso con tus falsedades apoderarse de mi patrimonio!
Porque yo tenía un corazón que supo amar sinceramente, corazón que te di sin pensar porque te amaba locamente.
También tenía un alma pura que sabia de ilusiones, que te di en un beso y sin ponerte condiciones.
Te di todo lo hermoso que era mi patrimonio. ¡Tú te robaste mi vida y se la regalaste al demonio!
A.D
SALUDOS DE TU AMIGA
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