Solo necesitas algo muy importante de tu parte; enamorarte de la vida.
Deberás creer en el amor y encarnarlo porque el amor derrite al odio y lo transmuta, lo convierte en si mismo, el amor y el odio son la misma fuerza dirigiéndose en distinta dirección.
Verás que la felicidad será espontánea cuando te sientas en paz contigo mismo.
No luches contra lo que no te gusta, ignóralo. No mires aquello que te hace sufrir!
Eso que tu llamas problemas tienes que convertirlos en oportunidades, no los bautices "Problema", bautízalos "Oportunidad"! Porque los famosos problemas no existen, Dios usa muchos disfraces, tiene una imaginación increíble, incluso se disfraza de "Oportunidad" (problema), para probar tu temple, tu fe y tu fortaleza.