Un hombre quería mostrarle a su hijo la pobreza y lo llevó donde una familia campesina.
Al regresar le preguntó al niño: ¿Qué te pareció la pobreza?. El niño respondió: ¿De qué pobreza me hablas?. Ellos tiene cuatro perros, yo tengo uno. Nuestra piscina llega sólo hasta la mitad del jardín, en cambio ellos tienen un riachuelo que nunca termina.
Nosotros tenemos lámparas importadas, ellos tienen estrellas.
Nuestro patio llega hasta la pared del vecino, el de ellos termina en el horizonte. Ellos tienen tiempo para sentarse a conversar, en cambio tú y mamá tienen que trabajar todo el tiempo, y casi nunca los veo.
El niño finalmente añadió: Gracias papá por mostrarme la verdadera riqueza.