¡EL VIAJE!
La lluvia lava el alma,
el diario vivir, la oscurece,
sin darme cuenta de mi sombra,
el arcoiris cambia de color,
la luz y la sonrisa del niño,
se convierte en oscuridad,
arrugas en la frente,
y gestos malhumorados.
Te has fijado, cuando vives el amor,
las capas de cebolla de la edad,
se aflojan y desprenden,
regresas a tu núcleo original.
Sólo quien lo ha vivido,
comprende lo que digo,
el amor cambia y transforma.
Lo he vivido, pasa rápido,
como el vuelo del colibri.
Se detiene en el aire,
batiendo sus alas.
La flor y el ave se dan un beso,
un instante del amor.
Por la tarde, ésta seca cae,
el pajarillo, cierra sus ojos,
sus patas se desprenden del árbol,
y la hojarasca se convierte
en su lecho eterno.
Somos flores, somos pájaros.
Que nuestro vuelo las visite,
que nos ofrezcan
el dulce de su néctar.
También, pronto demasiado,
nos iremos a dormir,
entonces, las almas se despiertan,
y el mítico Eden,
del que tuvimos una probadita,
se convertira en nuestro jardín.
EL POETA DEL AMOR.
MÉXICO..