No condenes a quien se equivoca, no ridiculices a nadie. No menosprecies a quien tiene un defecto físico. Nunca ofendas a nadie, no grites ni exijas en forma perentoria, no intentes forzar a que se hagan las cosas a disgusto, nada bueno lograrás. Evita crear resentimientos en las demás personas. Serás la primera víctima de estas actitudes. |