Jesús dijo esto para ver qué decía Felipe, aunque El ya había decidido lo que tenía que hacer.
Felipe le contestó: - "Pues ni con doscientos días de salario podríamos compar pan para dar a cada persona por lo menos un pedazo" -
Allí cerca estaba Andrés, que era discípulo de Jesús y hermano de Simón Pedro. Y Andrés le dijo a Jesús:
- Un niño que está aquí tiene cinco panes de cebada, y también dos pescados. ¡Pero eso no alcanza para nada!
Entonces Jesús dijo a sus discípulos: - " Díganle a todos que se sienten a descansar un poco".
Toda la gente se sentó sobre la hierba, eran como cinco mil personas, sin contar a las mujeres ni a los niños. Entonces, Jesús tomó los panes, dio gracias a Dios, y los repartió entre sus discípulos. Luego sus discípulos los repartieron entre la gente que estaba sentada. Jesús repartió también los pescados, y comieron todo el pescado que querían.
Después que todos comieron y quedaron satisfechos, Jesús dijo a sus discípulos:
"Recojan los pedazos que sobran, para que no se desperdicie nada".
Los discípulos recogieron todo lo que había quedado, y de cinco panes de cebada sobraron doce canastas llenas.
Al ver todos este milagro que Jesús había hecho, dijeron: - "no hay duda que este es el profeta que tenía que venir al mundo" -.
Y todos querían llevarse a Jesús y hacerlo el rey de ellos. Pero Jesús se dio cuenta de lo que pensaban hacer, y se fue sólo otra vez a lo alto del monte.
Vida de Jesús (Nuevos Lectores)