Yo puedo hablar con Dios acerca de los niños y de las niñas que viven en mi barrio, y de los que viven muy lejos: Algunos de ellos tienen piel oscura, otros la tienen clara otros más la tienen amarilla Y todos estos niños y niñas se parecen mucho a mí, Necesitan jugar y divertirse, también ser amados y tener amigos. Yo puedo ser amigo de los niños de mi propio país y del mundo entero. Yo puedo pedirle a Dios que los bendiga.
"¿No nos ha creado un mismo Dios?" Malaquías 2:10
"Bueno es Dios para con todos, y sus misericordias sobre todas sus obras" Salmos 145:9
Te damos gracias, Dios porque podemos ser amigos de los niños de todas las razas y de todas las naciones. Ayúdanos a tratar a todas las personas con respeto y a hacerles bien a todos. Ayúdanos a recordar que tu amor es para todas la gente de todo el mundo. Robbie Trent
Karmen Ministerio Mujeres en Victoria
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