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Hacerle Lugar a Jesús
Si celebrar la navidad, es realmente adorar y encontrarse con Cristo con toda Su humildad, en toda Su gloria y en todo Su Ministerio, entonces lo que necesitemos es menos. Simplemente, menos de nosotros mismos para hacerle lugar a Él. El agua viva que calma la sed. Sin ella, no hay verdadera adoración.
No había lugar en la posada. Ésta es una imagen inolvidable para los que hemos oídos la historia de la Navidad. Una total ironía, absurda, y correcta al mismo tiempo: la noche en que el Creador del Universo está a punto de mostrar Su rostro al mundo, no hay lugar para Él para que nazca dentro de una casa.
Parece insultante que nadie le hiciera lugar a una mujer en estado extremo de embarzo, que viajaba con sufatigado esposo. Pero quizás el Señor prefirió ven ir al mundo de esa manera, naciendodonde ya había lugar para Él. Nació con el fresclo viento que soplaba contra la entrada de la cueva; nació bajo los ojos del humilde animal que lo había llevado a Él y a sSu madre, de norte a sur. Nació para aquellos que aguardan bajo el vasto cielo, y que vinieron corriendo cuando se enteraron de que Él había llegado. Nació para la mujer que Él había convertido en Su hogar durante nueve meses; para el hombre que había desestimado todas las expectativas que tenía, para hacerle sitio a Aquel que tan largamente esperado en cuyo corazón resonaban las palabras de su amada: "Hágase conmigo conforme a tu palabra (Lucas 1:38).
Tenemos entonces que Dios llegó adonde había lugar para Él. La primera persona que lo recibió fue la joven en cuyo vientre vivió, razón no pequeña para la alabanza espontánea de María: "Desde ahora me dirán bienaventurada todas las generaciones. Porque me ha hecho grandes cosas el Poderoso; Santo es su nombre (Lucas 1:48-49).
Charles F. Stanely
Así que, cuando usted escuche o alguien exprese "Happy Holydays",
responda con confiana:
FELIZ NAVIDAD!,
Porque la Navidad consiste en una persona, y Su nombre es
JESUCRISTO.
Perla
Ministerio Mujeres en Victoria
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