Recordemos Lo Eterno

Padre Celestial, oramos por consuelo y paz por aquellos directamente afectados por los eventos trágicos de esta semana.
Por aquellos que han perdido un ser querido, oramos que Tú llegues a ser su refugio y fuente de fortaleza.
Por los niños que perdieron un padre o una madre, oramos para que sus corazones permanezcan tiernos y
receptivos a Su Palabra. Oramos por aquellos buscando respuestas. Por favor revélanos Tu verdad y
ayúdanos a entender que apartados de Ti, ¡no hay nada! En el nombre de Jesús oramos, Amen.

Esta oración fue escrita después de una gran tragedia en la cual muchas personas murieron. Y desafortunadamente,
también podría ser una oración para cada día del año por las miles de personas que mueren en accidentes en automóviles,
o como resultado de violencias sin sentido o enfermedades; o por aquellos que pierden la vida debido a inanición o
una adicción de drogas, o debido a la tragedia de guerra. Tantas vidas parecen cortadas innecesariamente.
Y Aún vidas que alcanzan su "potencial plena" son increíblemente cortas; "¿Qué es su vida? Ustedes son como la niebla,
que aparece por un momento y luego se desvanece" (Santiago 4:14). En la manera que "maduro" en edad, esta
verdad vuelve a ser mas y mas real. Nuestro tiempo es corto!

Debemos orar sinceramente por aquellos que están afectadas por tragedias globales; no es muy frecuente cuando
el mundo entero puede orar para un grupo de personas específicas. Y cuando occurre tradias individuales,
debemos orar sinceramente y buscar maneras para consolar aquellos en necesidad. Pero también debemos tomar
un momento para considerar la fragilidad y brevedad de la vida, y como nuestras prioridades reflejan esta verdad.
Tenemos que luchar para un entendimiento mas firme de que todo afuera de la voluntad de Dios algún día desvanecerá.
Cualquier otro "dios" que reciba nuestra adoración en la forma de exceso de tiempo, pensamiento, energía,
o recursos seguramente será quemado y apartado.

1 Corintios 7:29,30
"Lo que quiero decir, hermanos, es que nos queda poco tiempo. De aquí en adelante...los que disfrutan de las cosas de
este mundo, como si no disfrutaran de ellas; porque este mundo, en su forma actual, está por desaparecer."

No importa cuantas veces leo estas verdades en la Palabra de Dios, Yo se que todavía no entiendo completamente.
Yo se que nuestro tiempo es corto, pero continuamente gano mi identidad y llego a estar absorto
en mis juguetes. ¡Padre perdóname!

Si algo bueno puede salir de una tragedia, solamente será en la manera que proponemos a no fijarnos "en lo visible
sino en lo invisible" (2 Corintios 4:18a). Necesitamos permitir que eventos como este establezcan firmemente la
verdad que "lo que se ve es pasajero, mientras que lo que no se ve es eterno" (2 Corintios 4:18b).

Es hora que volvamos nuestros corazones a Dios en avivamiento verdadero y que hagamos TODO como si fuera
para el Señor. Ya no podemos seguir mas dando nuestras vidas a lo temporal y pasajero. Es hora que le adoremos
a El sin vergüenza y que le sigamos donde El nos guíe. Es hora que nos acerquemos a
Su presencia y que recordemos lo eterno.

Tenga un Dia Centrado en Cristo!

Steve Troxel

    
Padre amado, en el nombre de Tu Hijo Jesucristo te rogamos que toques a todos aquellos
que aún no te conocen, te rogamos Padre amado que arranques corazones de piedra y pongas
corazones de carne entre sus carnes, dales un nuevo corazón un nuevo espíritu y pon el querer
como el hacer en ellos, pon un deseo ardiente de doblar rodillas ante Ti, y de buscar Tu rostro
que puedan comprender que apartados de Ti nada somos, dales discernimiento del bien y del
mal, amado Padre, guardalos del mal, libralos de tentaciones y por favor Padre amado, sobre
toda cosa guardada, guarda sus corazones porque de él mana la vida. Señor, que las personas
que todavía no han llegado a conocerte, este sea un tiempo propicio para consagrarse a Ti,
apartarse de su vana manera de vivir y guscar la guianza de Tu Santo Espíritu para poder
disfrutar de esa vida maravillosa junto a Ti. en el nombre de Cristo Jesús, Amén