Gracias Señor, por los
favores recibidos y por los muchos milagros
con que salpicas mi vida
a cada momento.
Gracias Señor, por las
cosas que al faltarme, he aprendido a
valorar.
Gracias Señor, por el
sustento de todos los días, y por la fe de
todos los momentos.
Gracias Señor, por el
dolor de las injusticias recibidas, por las
humillaciones,
y por todo lo que al
herirme, he aprendido a meditar en tu
presencia.
Gracias Señor, por el
milagro de todo mi ser, por escoger tu
imagen como modelo
para crearme y porque
desde que te conocí, estás dispuesto para
mí, siempre que te busco.
Gracias Señor, por el día
que despido con serenidad y el nuevo día que
recibo con esperanza.
Gracias Señor, por los
esfuerzos realizados y los logros
alcanzados. Gracias por tantos beneficios.
Gracias Señor, por los
gratos momentos, los nuevos conocimientos, y
tantas experiencias felices.
Gracias Señor, por los
errores de los que he aprendido algo y por
los golpes que me han hecho madurar.
Gracias Señor, por el
tesoro del hogar, el regalo de los amigos y
el apoyo de tantas personas.
Gracias Señor,
por la fe que me ilumina, la esperanza que
me mueve y el amor que me da felicidad.
En tus manos bendito Dios, pongo mi vida y
la de mis seres queridos con una firme
confianza.
Quiero amarte con toda
el alma, amarme y amar a los demás.