El Don de la Exhortación
El plan de Dios es equipar a los creyentes con dones espirituales para que Su reino pueda venir de acuerdo con Su plan. El don de la exhortación tiene estas características: Un objetivo de madurez espiritual en los demás. Los exhortadores instarán con calor y con palabras estimulantes a buscar la santidad y a desarrollar una fe madura. Son capaces de visualizar cómo Dios puede trabajar en nosotros para que logremos desarrollar todo nuestro potencial en Cristo. Discernimiento de las causas fundamentales. Al aconsejar, el exhortador identifica el problema causante de nuestra situación, tales como el orgullo, temor u otros obstáculos que impiden el crecimiento.
Habilidad para resolver los problemas. Tras analizar la esencia del problema, una persona con este don ofrecerá pasos correctivos basados en principios bíblicos Insistirá en que se le dé una cuidadosa consideración a la verdad de Dios, y precisará los resultados de la obediencia y desobediencia. Nuestra respuesta a los exhortadores puede variar. Podemos sentir que han simplicado nuestra situación o que están tratando de "ayudar" a Dios. Su manera resuelta de hablar podrá parecernos como demasiado confiada. Pero un examen de sus vidas mostrará que han vivido realmente las verdades bíblicas que nos están ofreciendo. Al considerar su consejo, podemos poner en duda su aplicación de la Biblia o la autenticidad de su preocupación por nuestro malestar. Un amonesgtador nos dice la verdad tal como el Espíritu Santo se la revela, aunque eso signifique ser rechazado. Como cristianos, necesitamos oír la verdad sobre nosotros mismos y sobre cómo vivimos. Dr. Charles F. Stanley
Lectura Colosenese 3:12-17
Y todo lo que hacéis,. sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús. dando gracias a Dios Padre por medio de él. Colosenses 12:17
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