Vestido con
ropa de
Victoria
Es muy
importante
que
busquemos
vivir la
vida que
Dios ha
planeado
para
nosotros.
Uno se
encuentra
siempre con
personas que
viven la
vida de
cualquier
forma y a
eso lo
llaman
destino.
Pero el que
cree en
Cristo y es
uno con Dios
y empieza a
entender que
Dios planeó
una vida
gloriosa. Al
renovar
nuestra
mente con
Dios vamos
estableciendo
esa clase de
vida, que es
la vida
abundante,
la vida que
viene del
cielo, la
vida
victoriosa.
Tenemos que
tener una
búsqueda
permanente
de lo que el
reino nos va
trayendo
para poder
vivir la
vida que
Dios ha
planeado
para
nosotros y
alcanzar
nuestro
destino
divino. Al
ser
alumbrados
por la
Palabra
podemos
aplicar
nuestra fe
para hacer
Su voluntad
y así vamos
a ir
alcanzando
metas
superiores
en lo
personal y
en lo
ministerial.
En la medida
que usted
desarrolla
su potencial
con Dios va
a tener
mayor
revelación
de cómo
tiene que
hacer las
cosas y Dios
lo va a
premiar en
todas las
áreas.
Diga:
¡Hay algo
adentro de
mí que no
puede ser
derrotado,
es la vida
del Hijo de
Dios en mí!
Es muy
importante
que se mire
a sí mismo
como Dios lo
mira y de
esa manera,
vaya
removiendo
debilidades
personales
que le
pueden
quitar
bendiciones.
1- Dios
quiere que
su vida esté
llena de
gozo.
Distintas
debilidades
tendrán que
ir saliendo
de su vida,
así se podrá
mover en una
vida plena y
llena de
gozo. Usted
tiene una
conexión en
el espíritu
con la
fuente de la
alegría que
es Dios.
Usted no
vive una
vida de gozo
por las
circunstancias,
un día le va
mal y otro
le va bien,
sino que
tiene gozo
porque ya
tiene la
confianza de
que Dios le
ha provisto
la
recompensa
de la
victoria.
2- Dios le
ha dado el
favor para
vencer las
circunstancias.
Circunstancias
le vienen a
todos pero
detrás de
eso está el
enemigo que
lo quiere
llevar a la
derrota.
El que
vive dentro
de usted
nunca hace
provisión
para el
fracaso.
Uno tiene
que saber
que no puede
resignarse
al fracaso
porque no es
algo que
Dios le
proveyó sino
que es el
enemigo que
lo quiere
llevar a ese
nivel.
Problemas le
vienen a
todos, pero
usted sabe
que hay
provisión de
victoria.
Véase como
Dios lo ve,
un hijo de
Dios para
manifestar
los cielos
en la
tierra.
3- Dios no
quiere que
viva
esclavizado
por nada
malo en esta
tierra.
Él lo
redimió de
la maldición
y ha hecho
provisión
para que
usted viva
bendecido.
Isaías 61:10
“En gran
manera me
gozaré en
Jehová, mi
alma se
alegrará en
mi Dios;
porque me
vistió con
vestiduras
de
salvación,
me rodeó de
manto de
justicia,
como a novio
me atavió, y
como a novia
adornada con
sus joyas.”
Tiene que
verse a
usted mismo
como Dios lo
ve, como lo
dice este
versículo,
una persona
que fluye en
el gozo del
Señor y que
la alegría
de Dios va
fluyendo en
su vida.
Tenemos que
buscar vivir
la vida como
Dios la
planeó.
Cuando Dios
creó al ser
humano lo
creó
perfecto y
para que
viva de esa
manera.
Todo lo que
era de
fracaso o
frustración
ya lo venció
Jesús.
Al permitir
que esto se
manifieste
en nuestras
vidas, al
dejar que el
Espíritu
Santo lo
haga
realidad, se
comienza a
reflejar
afuera lo
que tenemos
adentro. Lo
que tenemos
que vivir es
la vida de
Dios, así
reflejaremos
la vida de
Cristo.
Usted va a
ser bendito
dondequiera
que se
mueva,
bendito en
la familia,
en el
trabajo, en
la iglesia.
Va vivir una
sola clase
de vida, que
es la vida
del cielo,
la que Dios
planeó para
usted. Esa
es la vida
abundante
que Jesús
vino para
darle.
Confiese:
“¡Yo voy a
revelar el
cielo en la
tierra y en
gran manera
me gozaré!
Apóstol Juan
Crudo