Fortaleza para vencer las preocupaciones
En la Palabra de Dios encontrarás la fuerza necesaria para seguir adelante en tu caminar junto a Él.
Por qué te abates oh alma mía? Y por qué te turbas dentro de mi?
Padre, tú te resistes a los soberbios y das gracia a los humildes. Por lo tanto, yo me someto a ti en el nombre de Jesús, yo resisto al diablo y éste huirá de delante de mí. Yo resisto las preocupaciones de este mundo que tratan de aprisionarme a diario. Si el Señor no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican.
Jesús yo vengo hasta ti trabajado y cargado y tú me haces descansar. Tú aligeras, alivias y refrescas mi alma. Yo llevo tu yugo sobre mí y aprendo de ti, que eres manso y humilde de corazón y hallo descanso, alivio, refrigerio, recreación y bendita paz para mi alma.
Yo hecho sobre ti mi carga Señor y tú me sustentarás. Te doy gracias porque tú no dejarás para siempre caído al justo. En el nombre de Jesús yo resisto al diablo. Estoy firme, arraigado, establecido, fuerte, inmóvil y determinado en la fe. Yo descanso de la labor humana y soy celoso y me obligo y trato con diligencia entrar en el reposo de Dios para conocerlo y experimentarlo por mi mismo.
Padre, te doy gracias, porque tu presencia está conmigo y me da descanso. Estoy quieto y descansando en ti, Señor. Yo espero en ti y con paciencia, descanso en ti. No me alteraré ni dejaré que se turbe mi corazón, ni tampoco dejaré que entre en él temor. Mi esperanza está puesta en ti Dios y espero con mis expectativas puestas en ti; porque aún he de alabarle, porque tú eres el socorro en mi rostro y mi Dios.
Pastora Sonia de Luna
Escrituras de Referencia: Salmo 42:11 Hebreos 4:10,11 Santiago 4:6-7 Éxodo 33:14 Salmo 17:1 Salmo 37:7 Mateo 11:28-30 Juan 14:27 Salmo 55:22 Salmo 42:11 1 Pedro 5:9
|