Un año duro en el amor
por Enrique Monterroza
Estamos por terminar el 2010 y es una buena oportunidad para reflexionar sobre nuestra vida durante cada episodio del año. Siempre es bueno analizar qué cosas hicimos bien y que cosas no, para que en este nuevo año que pronto comenzara podamos mejorar en nuestra vida.
Para muchos quizá este año sea para el olvido, quizá porque no te fue tan bien en el amor, quizá porque tuviste algunas relaciones de noviazgo que no funcionaron o tal vez porque pasa otro año más y aun no llega a tu vida el hombre o la mujer de tus sueños.
Hoy quiero dedicar este articulo a todos aquellos que durante este año se enfrentaron a situaciones duras en el amor, quizá fracasos, quizá errores, quizá decepciones o simplemente fue un año largo de espera sin aun encontrar el amor de tu vida, para ustedes con son estas palabras.
Para los que comenzaron este año en soltería.
Quizá cuando analices este año te darás cuenta que todo comenzó muy bien, parecía que este seria tu año, todo pintaba para que las cosas se dieran perfectamente. Comenzaste este año con la seguridad de que Dios te daría a esa personita con la que has estado soñando todos estos años atrás.
Pasaste varios meses quizá orando por esa persona que creías que podría ser la indicada, entablaste una bonita amistad, hasta cierto punto te ilusionaste, pero de pronto te diste cuenta que esa persona solo tenía ojos de amigos para contigo. Toda aquella ilusión que en su momento hubo se vino abajo y volviste a creer que no fuiste hecho para el amor.
Nuevamente la soledad inundo tu ser, aquel sentimiento de menosprecio se hizo presente, por momento pensaste que no eras lo suficientemente guapo o guapa para que alguien se fijara en ti, comenzaste a ver tantas cosas externas olvidándote que para Dios lo que más vale es lo interior.
De pronto apareció alguien que te cambio esa tristeza en una alegría, rápidamente te volviste a ilusionar, y es que pareciera que tienes una facilidad única para ilusionarte tan rápido, sin antes estar seguro de las cosas. Luego de un tiempo, nuevamente te diste cuenta que todo quedo en eso: “una simple ilusión” y nuevamente todos aquellos sentimientos encontrados inundaron tu vida y tu relación con Dios se desestabilizo.
Ahora te encuentras a días para finalizar este año, con un dolor en el interior de tu corazón, con un sentimiento de impotencia frente a las cosas que te pasan y con un corazón frustrado por el amor que aun no ha llegado. Lo más duro quizá de todo es que tu fe a lo mejor ha tambaleado y ahora te cuesta creer que las cosas serán diferentes, pero aun así tengo que decirte que las cosas pueden cambiar y Dios quiere que sean diferentes.
Quiero darte algunos consejos que te pueden ayudar a que este año que viene sea totalmente diferente a este que te toco vivir, por lo que considero que si tomas a bien llevar a cabo mis recomendaciones tu panorama puede cambiar.