Tome doce meses que estén bien maduros. Vea que estén limpios de amargos recuerdos, de odio y rencores.
Límpielos cuidadosamente de pegajosa malevolencia y quíteles cualquier mancha de mezquindad y pequeñez. Vea que en estos meses no quede nada del pasado y téngalos tan frescos y limpios como cuando salieron del GRAN ALMACÉN DEL TIEMPO.
Corte esos meses en treinta partes iguales. Esa cantidad rinde trescientas sesenta y cinco porciones.
No trate de cocinarlo todo a la vez, prepárelo día a día de la siguiente manera:
Ponga en cada uno de ellos:
12 partes de Fe 11 partes de Paciencia 10 partes de Entusiasmo 9 partes de Trabajo (no omita este ingrediente o echará a Perder el gusto de su receta) 8 partes de Esperanza 7 partes de Fidelidad 6 partes de Libertad 5 partes de Amabilidad 4 partes de Descanso 3 partes de Oración 2 partes de Meditación 1 parte de Resolución Bien Seleccionada
Agregue: una cucharada de Espiritualidad, un poco de esparcimiento, un poquito de Simpleza y una taza bien limpia de Buen Humor , añada a todo esto Amor al gusto, mezcle con una buena dosis de energía. Aderécelo con Sonrisas y un poquito de júbilo…. después sírvalo con una salsa de Serenidad, Altruismo y Alegría.
¡Abrazos y felicidades! Esta receta es de excelentes resultados en cualquier parte de la “Tierra”.
Salmo 86:12,13. Te daré gracias, Señor mi Dios, con todo mi corazón y glorificaré tu nombre para siempre. Porque grande es tu misericordia para conmigo… De la Web