Estimado hermano y amigo (a)

¿Se ha preguntado usted alguna vez, si su vida está impactando a los que están a su alrededor?
¿O Si está calificado para hablar a la gente acerca del Señor Jesús?  Algunos creyentes creen
que necesitan educación bíblica formal, o algún título para enseñar a otros a vivir una vida
consagrada. Pero la verdad es que Dios nos ha equipado y nos ha llamado a ser ejemplos vivientes
de Su amor.
Mi madre tuvo una inmensa influencia en mi vida, aunque solo terminó la escuela primaria. Cómo
inspiro mi relación con el Señor en forma tan poderosa!  Ella me leía la Biblia, me explicaba la
importancia de obedecer los principios que Dios nos enseña en Su Palabra.  Mi madre confiaba y
caminaba con el Padre diariamente.  Demostraba cómo amar y aplicar las sagradas Escrituras.

Recuerdo cómo buscábamos en el índice de su vieja y gastada Biblia negra, el único libro que tenía
y los dos encontrábamos t6antos temas.  esos son momentos que un niño nunca olvida.  Todavía
le puedo escuchar diciendo: "Charles obedece a Dios".  Como lo decía cada noche, mientras
yo era un muchacho, ella grabó ese principio en mi mente y corazón a través de sus palabras y su
ejemplo. Por medio de ella aprendí que mi responsabilidad era someterme al Señor y Sus planes

El punto es, usted puede marcar una diferencia extraordinaria en el lugar donde está.  No necesita
un entrenamiento especial para servir a Dios.  Usted puede tener una tremenda influencia en otros,
 con tan sólo obedecer a nuestro Padre celestial.  Usted tiene la oportunidad de compartir los
principios poderosos que el Señor ha usado para fortalecer su caminar con  Él.  Dios quiere
simplemente, que usted le permita al Espíritu Santo, trabajar a través suyo y demostrar
amor incondicional a todos su conocidos.

Eso es lo que dijo Moisés a los israelitas: "Has declarado solemnemente hoy que Jehová es tu  Dios
y que andarás en sus caminos, y guardarás sus estatutos... a fin de exaltarte sobre todas las
naciones que hizo, para loor y fama y gloria, y para que sea un pueblo santo a Jehová tu Dios
(Deuteronomio 26:17-19)

En otras palabras, los israelitas fueron identificados como su pueblo, por eso tenían que dedicarse
a Él de todo corazón y ser un ejemplo de Su amor, para que sus hijos y las naciones que les
rodeaban lo vieran.  Lo mismo se espera de usted. Dios le llama a honrarle y someterse a sus
mandamientos, para que a través de usted, otros sean atraídos a Él (Jn 12.32).
Pero, ¿cómo puede usted hacer esto exitosamente?...

(vea la continuación....)