Resurrección JUAN 20
En un lapso de tres días, los seguidores de Cristo pasaron de una tristeza desgarradora a un jubiloso triunfo. La cruz había gritado: "Es el fin", haciéndolos sentir desesperados e indefensos. Pero la resurrección pregonó: "Es el comienzo", trayendo confianza y fortaleza. La nube de duda y desesperación que los había envuelto se desvaneció, y fue sustituida por una fe inquebrantable.
Cuando los discipulos se dieron cuenta de que Cristo había resucitado su esperanza cobró vida; ahora todo lo que él dijo se hizo realidad. No habían creído una mentira. Su victoria sobre la muerte fue la prueba de fuego que selló para siempre su firme convicción de que él era el Mesías.
Conmemoramos la muerte de Cristo en la cruz con solemnidad, y la resurrección con alabanza y canto. Todas las bendiciones de la cruz del Salvador son confirmadas por la resurrección. ésta demostró que el Padre quedó satisfecho con el pago que hizo el Hijo de nuestros pecados. Ahora podemos saber que nuestros pecados son perdonados, y que estamos eternalmente seguros.
Además, Jesús promete que nosotros también seremos resucitados, y que recibiremos cuerpos nuevos. La muerte física no pudo retenerlo, ni tampoco triunfará sobre nosotros. Porque él venció la tumba, nosotros tenemos la misma clase de vida que él tiene: eterna e indestructible.
Como cristianos, podemos celebrar el Domingo de Pascua con gran regocijo. Gracias a este acontecimiento, nuestras vidas han cambiado para siempre. Hemos sido transformados y recibido una vida nueva. Con fe inquebrantable, confiamos en la Biblia, porque el poder de Cristo sobre la tumba demuestra que él puede cumplir, y cumplirá cada palabra.
Dr. Charles F. Stanley
Los discípulos de Cristo debemos predicar tanto sobre el camino de salvación como sobre el camino de perdición. Debemos explicar cómo los pecadores pueden alcanzar el perdón y presentar los peligros de rechar el evangelio. Que los pecados de los que escuchan sean o no perdonados, depende de su aceptación o rechazo de Cristo.
Entonces Jesús les dijo otra vez: Paz a vosotros. Como me envió el Padre, así también yo os envío. Juan 20.21
El poder para poder realizar la misión viene del Espíritu Santo.
Y habiendo dicho esto, sopló, y les dijo: Recibid el Espíritu Santo. Juan 20.22
Anehlemos diariamente la llenura de Su Espíritu y cumplamos con la Gran Comisión, En Su amor y mi amor
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