La responsabilidad individual
Cada miembro de la iglesia juega un papel esencial en la determinación de la vitalidad de su congregación (Ef 4.7-16). Podemos ser, o bien un canal de poder del Espíritu, o bien un factor de debilidad en nuestra iglesia local. La manera como usted vive no es solo una cuestión personal, sino que afecta también a todo el cuerpo de creyentes en maneras que son evidentes solamente para Dios.
La mayoría de los cristianos quieren que sus congregaciones exhiban el poder de la iglesia del Nuevo Testamento. ¿Quién no quisiera ser parte de una iglesia en la que las oraciones son contestadas, los enfermos sanados, y los perdidos salvados? Pero el poder de Dios fluye solamente a través de las iglesias cuyos miembros han rendido personalmente sus vidas a la dirección del Espíritu Santo. Me temo que demasiados creyentes no están dispuestos a hacer el compromiso personal que se requiere para tener esa clase de fe. No podemos tener los beneficios de una comunidad dinámica sin el sacrificio de nuestra voluntad.
Hacemos un solo viaje por esta vida terrenal. La decisión que tenemos ante nosotros es si vamos a vivir para el Señor o para nosotros mismos. ¿Va usted a estar lleno del Espíritu, o lleno de sí mismo? ¿Dejará que Dios le utilice para llevar a cabo sus grandes planes, o desaprovechará su oportunidad? Hoy es el día para tomar la decisión, porque usted nunca sabe cuántos mañanas más tendrá.
Si usted quiere ser usado grandemente por Dios, empiece a seguir estos pasos:
Reconozca su incapacidad para cumplir con el propósito de Dios para su vida sin el poder del Espíritu Santo.
Enfrente cada pecado conocido que el Señor traiga a su mente. En vez de buscar excusas, coincida con Dios en que debe arrepentirse; es decir, dar la espalda al pecado y volverse al Señor (1 Jn 1.9). Dios quiere hacer de usted un vaso puro lleno de su Espíritu.
Ríndase a Cristo. Esto significa que usted transfiere voluntariamente a Jesús, todo lo que tiene, el control, y el uso de su cuerpo, alma y espíritu. Él es con todo derecho su Señor, porque le creó y le redimió. No se trata de una transacción parcial en la que usted se quedará con una parte y le dará el resto a Él. Todo le pertenece a Él, y es puesto bajo su autoridad y control: sus derechos, planes, deseos y sueños.
Crea que el Espíritu Santo le ha llenado. Si usted ha tomado los pasos anteriores, entonces en base a la autoridad de la Palabra de Dios, sepa que Jesús vivirá a través de usted (Gá 5.24, 25).
Viva en el poder del Espíritu Santo. Siga adelante con fe y obediencia, poniendo su confianza en Dios, quien promete hacerle competente para su llamamiento (2 Co 3.4, 6).
Si usted pone continuamente en práctica estos pasos, el Señor derramará su poder en su vida, y de ese modo, en su iglesia. Él le usará de maneras que nunca imaginó posibles. No podemos sentarnos en nuestras bancas, esperando que el poder de Dios caiga simplemente del cielo. Cada uno de nosotros debe comprometerse a dejar que Cristo viva a través nuestro. Entonces, nuestras iglesias se convertirán en fuerzas motrices de energía divina, capaces de hacer su parte para evangelizar al mundo.
Preguntas de estudio
- Lea Efesios 4.1-16.
- ¿Qué clases de comportamientos y actitudes están presentes en una iglesia llena
del Espíritu Santo (vv. 1-3)? ¿Cuáles son las fuentes de la unidad (vv. 4-6)?
- Aunque nuestros dones espirituales varían en la iglesia (vv. 7-11), ¿hacia el logro
de qué metas debemos todos trabajar, según los versículos 12-15?
- ¿Cuál será el resultado cuando todos los miembros del cuerpo trabajan juntos en sumisión a
Cristo? ¿Qué palabra del versículo 16 implica que una iglesia dinámica cumple su llamamiento de evangelizar a los perdidos?
Pastor charles F. Stanley
Ministerio Mujeres en Victoria Somos siervas de Dios que trabajamos por la restauración integral del Cuerpo de Cristo y especialmente en la restauración de la mujer en todas las áreas
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