~~Una carta para mi princesa~~ - Ministerio Mujeres en Victoria

CARTA PARA MI PRINCESA DE TU PADRE DIOS

Esta carta que a continuación presento la inspiró Dios para una tía muy querida por mí,
sin embargo también inquietó mi corazón para que la publicará porque a través de ella,
Dios quiere ministrar en específico a algunas vidas. Así que en obediencia a Él la
comparto con ustedes.

Querida Hija Mía:

Sé cuán abrumada te sientes. La carga es tan pesada que a veces sientes que
no podrás continuar. El peso de las responsabilidades es tanto que a veces
no tienes tiempo ni para descansar. Se ha hecho difícil seguir el camino sin
mirar atrás, pero como sabes que la mejor decisión que tomaste ha sido servirme
y creer en mí; aunque agotada, no te has rendido.

Yo soy tu Padre Amante, el que te sostiene, quien nunca te ha dejado sola.
Aunque no lo logres ver ahora, mis pensamientos y mis caminos son más
altos que los tuyos. Mi gracia ha sido derramada sobre ti, yo te he dado las
armas para que pelees y ganes esta batalla.

El día de hoy quiero que sientas mi Espíritu Santo inundando tu vida,
fortaleciéndote, infundiendo nuevos alientos, depositando una
alabanza nueva. Hoy quiero dar un refrigerio especial a tu alma para
que puedas recibir la paz que sobrepasa el entendimiento y se
sobrepone a las circunstancias.

No hay nada imposible para mí. Conozco cada detalle, lo que te
preocupa, lo que callas, lo que mi pides y lo que esperas. Recibirás
respuestas, experimentarás mi gloria, cantarás victoria. ¡No temas,
esfuérzate y sé valiente! Cobra ánimo, no desfallezcas. Yo renuevo
y deposito de mi aceite sobre tu vida; unción fresca y gozo en medio
de la prueba. Tú no estás sola, yo estoy contigo en todo el trayecto.

Cada palabra que he dicho será cumplida. A los tuyos los tengo
en el hueco de mi mano. Están a salvo, están seguros. Yo he de
suplir todo cuanto falte, tú serás testigo de mi provisión. Tú me
has dado, pero yo te daré aún más. Porque el que en lo poco me
es fiel, en lo mucho me place poner. Miro tu corazón y quiero que
sepas que observo y enjugo cada lágrima. Descansa en mi
presencia y espera con tranquilidad la bendición que habrás de recibir.

De tu Padre Que Te Ama,

Dios

Autora: Brendaliz Avilés

Que Belleza hnita Dios es Precioso ,me encanto

gracias Perlita hermoza DLB.

Siempre he creido que la gracia del Señor ha sido derramada en mi vida,

siempre he creido que lo poco que he hecho ha sido aceptado por Dios,

siempre he creido que nunca he estado sola, y que aunque a veces

sienta desfallecer, se que la mano de Dios me ha sostenido para no

quebrarme y desmayar, porque aunque he llegado a momentos de sentir

que ya no puedo, Dios vuelve a hablarme y hacerme sentir que soy su

hija, que soy la niña de sus ojos. gracias Padre, gracias Señor, gracias

mi universo que eres tu mi Dios.

Amadas todo hijo de Dios pasamos por desiertos desde el inicio de la creación vemos que nadie fue
llamado a un jardín de rosas, sin embargo si leemos atentamente la Palabra de Dios vemos que todos
o casi todos salieron brillando como oro fino, es tan importante creerle a Dios que Él nunca nos dejará
solas, que Él nos levanta y nos sostiene y en sus tiernos brazos nos arrulla, Él es tan maravilloso que
cuando acudimos a Él porque sentimos que ya no podemos más, el derrama el poder de su gracia
sobre nosotras, empezamos a sentir la tibieza de sus alas que nos cubren y nos hace sentir que
somos como aquellos bebes que anhelan su pachita (biberon) y que su mami los arrulla, los mece y
les canta una canción de cuna, asi es nuestro Padre, Él es tan amoroso y tierno que nos
fortalece y nos ayuda a seguir caminando la milla extra y su dulce Espíritu Santo pone cánticos
nuevos en nuestra boca y empezamos a sentirnos con nuevas fuerzas y ya no vemos el problema tan
grande, comprendemos que nuestro Padre es más grande que cualquier problema y que Él todo lo
que desea es coronarnos de favores. Esforcemos siempre, no temamos, Dios nunca nos dejará solas
y Él siempre nos dara la salida perfecta para ser esas mujeres victoriosas, vencedoras, mujeres que
brillamos, mujeres de propósito para grandes obras, las cuales Él las preparó de antemano.
Las amo,

Perla