Cuando la fe desmaya
Lectura: Marcos 9:17-29
Santiago 1.5 nos dice que Dios da sabiduría a quien se la pida. Sin embargo, después dice ue si dudamos, nuestras oraciones no serán contestadas.
Veamos algunas de las causas de nuestra incredulidad. Primero, la fe, por lo general, desafía el razonamiento humano. Por ejemplo, cuando tenemos problemas económicos la lógica dice que hay que ahorrar cada centavo, mientras que Dios dice que Él bendecirá al dador generoso. Segundo, los sentimientos de temor, incompetencia o culpa puede estorbar la confianza en la verdad bíblica. Tercero, muchas veces nos enfocamos en las circunstancias más que en nuestro Padre Celestial. Él está en actividad, pero fallamos en ver su mano. Por último, la incertidumbre en cuanto a la voluntad de Dios podrá llevarnos a dudar de Él.
Una fe fluctuante tiene consecuencias graves, pérdida de bendiciones, falta de paz y gozo, y el desánimo. ¿Cómo podemos, entonces, evitar vacilar en nuestra fe?
En Marcos 9, un hombre le rogó al Señor Jesús que reprendiera al espíritu que había poseído a su hijo. Cuando Cristo respondió que "al que cree todo le es posible", el padre dijo: "Creo, ayuda mi incredulidad" (vv.23,24), Y el Señor le concedió su petición. Al igual que ese hombre, nosotros podemos pedirle al Señor que aumente nuestra fe. Pero debemos también dedicar tiempo para leer la Palabra de Dios y meditar en Sus promesas.
Por la historia de Lucas sabemos que la duda es frecuente, y que Dios es paciente y comprensivo. La fe viene de Él por eso, cuando usted se halle en una encrucijada, y la respuesta adecuada requiere fe, o cuando ore y tenga dudas, pídale a Dios que le ayude a creer.
Charles F. Stanley
Amado Padr celestial en el nombre de TuHijo Jesucristo te rogamos que fortalezcas nuestra fe y que nos ayudes en nuestra incredulidad, Tu conoces el corazón de la perona que está leyendo este mensaje te ruego que suplas sus necesidades y concedas el deseos de su corazón, por favor Padre suple su necesidad conforme tus riquezas en gloria en Cristo Jesús, ayudala, fortalecela, si se encuentra enferma tócalal y sánala oh Dios de mi salvación ten misericordia de ella y levantala con tu diestra de justicia, renueva sus fuerzas y si no tiene ninguna multiplicaselas en el nombre de tu HIjo Jesucristo, Amén
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