Dios se nos reveló a través de Jesucristo, para que
pudiéramos tener la luz de la vida gracias a la
presencia del Espíritu Santo
Nuestra misión es permitir que la luz permanezca en nosotros
y siga resplandeciendo para la gloria de Dios.
Esto ilumina la vida de otros, y extiende la comunidad de Dios.
El amor hacia otras personas es la señal segura de que Dios
vive en nosotros y de que gozamos del compañerismo de Su amor.
Vive lleno de gozo, ten comunión con Dios y con su pueblo
(véase 1 Juan 1:3,4)