Adversidad ...
Todos nosotros enfrentamos adversidad, desánimo, o frustración. Cuando nos sucede, Dios se levanta enseguida a protegernos. El Salmo 147 promete a los creyentes sanar a los quebrantados de corazón y cicatrizar sus heridas. Cuando estamos turbados, debemos recurrir a Dios, y entonces, en su propio tiempo y de acuerdo a su propio plan, Él nos sanará.
Cuando Dios va a hacer algo hermoso, comienza con una dificultad. Cuando va a hacer algo bien hermoso, comienza con una imposibilidad.
Charles Inwood
"Porque todo aquel que es nacido de Dios, vence al mundo ... " 1 Juan 5:4
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