Que bello!!!
Cuando conocemos la grandeza de Dios, reconocemos nuestra pequeñez
y nos acercamos a Su trono de gracia con corazón humilde y agradecido.
Porque siendo lo que somos Él nos ama, nos cuida, nos bendice y nunca
nos deja solos ni desamparados.
Bendito y alabado sea Su santo nombre, dadle gloria y honra todos los
días de tu vida porque Él, cambia nuestros lamentos en baile
y nos llena de alegria
Gracias Marita, preciosas tarjetas con exquisito contenido.
Perla