Pasión
I
Tú tienes, para mí, todo lo bello que cielo, tierra y corazón abarcan; la atracción estelar ¡de esas estrellas que atraen como tus lágrimas!;
II
La sinfonía sacra de los seres, los vientos, los bosques y las aguas, en el lenguaje mudo de tus ojos que, mirándome, hablan;
III
Los atrevidos rasgos de las cumbres que la celeste inmensidad asaltan, en las gentiles curvas de tu seno ¡oh, colina sagrada!
IV
Y el desdeñoso arrastre de las olas sobre los verdes juncos y las algas, en el raudo vagar de tu memoria por mi vida de paria.
V
Yo tengo, para ti, todo lo noble que cielo, tierra y corazón abarcan; el calor de los soles, ¡de los soles que, como yo, te aman!;
VI
El gemido profundo de las ondas que mueren a tus pies sobre la playa, en el tapiz purpúreo de mi espíritu abatido a tus plantas;
VII
La castidad celeste de los besos de tu madre bendita, en la mañana, en la caricia augusta con que tierna te circunda mi alma.
VIII
¡Tu tienes, para mí todo lo bello; yo tengo para ti, todo lo que ama; tú, para mí, la luz que resplandece, yo, para ti, sus llamas!
Almafuerte
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