Recuerde cada día… y todos los días, que una parte muy
importante de usted mismo, es espiritual. No olvide, unos pocos minutos cada
día, su ser interior.
Allí radican sus más caros afectos, su deseo de triunfar,
su afán y su capacidad de superación, la pasión con que ama a quienes ama, el
amor por su trabajo y su sentido de la responsabilidad. Nunca lo olvide, en su ser interior está lo
más importante de usted mismo.
|