¿Quieres
vivir en un mundo en paz? Entonces regularmente haz lugar para la paz en tu
vida.
Hazte el
hábito de dedicar algo de tiempo cada día a no estar lleno de frenéticas
actividades. Hazte de algunos momentos de paz cada día y empezarás a notar más
cualidades de paz en las personas, lugares y hechos que te
rodean.
La paz
no es algo que pueda estrujarse entre dos actividades. Para entrar en contacto
con la paz hace falta dedicarle cierto tiempo.
Encuentra un lugar de calma y soledad, y tan sólo escucha. Deja
de lado la necesidad de llenar de actividad cada segundo, y, por un rato,
simplemente déjate ser.
Deja que
la tensión se desvanezca. Relaja tu cuerpo, Aquieta tus pensamientos, y
experimenta cómo es estar con plena conciencia del momento, con todas las
ansiedades lejos, muy lejos de ti.
Un mundo
pacífico se logra con personas en paz. Hazle un espacio cada día, y una
verdadera sensación de paz empezará a fluir desde ti, directo a tu
mundo.