Siente el árbol remusguillos de la raíz a la copa, de lo que se le avecina cuando todo se recobra. Siente el arbusto placer al renacer de las hojas, y al cubrirse su ramaje de florecillas graciosas.
Siente la hierba al crecer, cómo se luce y se adorna de confusas margaritas y tímidas amapolas.
Siente el poeta un amor que le llena y le rebosa, su capacidad de amar: Primavera es pretenciosa.
Que se siente Primavera de todos reina y señora, de montes, ríos y prados; de animales y personas. Hay un sentimiento unánime y que a todos engloba: el amor hacia lo bello que el corazón aprisiona.
(desconozco autor)
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