Una vez ví una caricatura del periódico veía una gran limosina, conducida por un
elegante chofer y con una dama muy elegante en la parte de atrás.
Esta dama traía unos potentes y modernos super binoculares. Y pensaba en volver a ver al cielo y visualizaba a Dios.
Llegado a un claro bajó rápidamamente y volvió a ver el cielo con sus nuevos binoculares, escudriñando el cielo de un lado para el otro buscandover a Dios.
Como obviamente imaginarán no vió nada y mientras caminaba triste y desilucionada hacia su limosina una pequeña flor decía: "Que pena que me busquen tanto en los lugares equivocados"
Cuántas veces nos pasa esto mismo y buscamos a Dios en todos los lugares donde no se encuentra.