Edward Smith es un estadounidense que, por sus declaraciones, parece no estar muy bien de la cabeza. Tiene 57 años y asegura que a lo largo de su vida mantuvo relaciones sexuales y amorosas con más mil autos.
Cuenta que su primera experiencia fue a los 15 y que actualmente mantiene un pasional noviazgo con un Volkswagen escarabajo al que llama Vainilla.
Según este loco lindo, hay coches macho y hembra y él, además de distinguirlos, se declara cien por cien heterosexual.
Edward asegura no estar mal de la cabeza y proclama a los cuatro vientos que su pasión por los vehículos a motor (también le gustan los helicópteros) no constituye ningún peligro para nadie. En este fragmento del reportaje aparece absolutamente salido en una feria de automóviles de segunda mano, sobando coches, dándoles besitos en el capó y valorando el calibre de los tubos de escape como un cliente en un club de alterne.
El currículum sentimental de Smith es francamente vistoso. Estuvo más de cinco años enrollado con una Volkswagen escarabajo (definitivamente le gustan las redondeces) que compró a una familia de Testigos de Jehová. En la actualidad, mantiene una relación abierta con Vainilla, porque también tiene relaciones sexuales con un Ford GT y un Ford Ranger, además de echarse más de una cana al aire cuando encuentra un ejemplar que lo pone a cien en cualquier parking.
Como sucede con otras parafilias extrañas y poco comunes, Edward no está solito en el mundo. Gracias a su aparición en el reportaje en cuestión hablando de sus pulsiones sexuales por los vehículos a motor y su difusión por Internet, por lo menos 500 personas en todo el mundo han reconocido tener los mismos gustos sexuales.
Fuente: DV